viernes, 27 de marzo de 2009

Primero lo primero

Edinson Volquez #36 (R), Damaso Marte #43, Jose Reyes #7 and Robinson Cano #24 (2R)
tras la eliminación de República Dominicana en la primera ronda del
Clásico Mundial de Béisbol al perder 3 carreras por 2 ante Holanda .


Después del penoso descalabro de la selección dominicana que participó en el Clásico Mundial de Béisbol, en estos momentos resulta odioso escuchar que el país se apresta a solicitar una sede para la próxima versión del torneo. No es que esté del todo mal tal gestión, pero cada cosa a su tiempo.

Pienso que lo primero que deben hacer las autoridades que inciden en el quehacer beisbolero del país, es una evaluación sincera y profunda de nuestra intervención en ese certamen, cuáles factores nos llevaron al fracaso, qué consecuencias podrían surgir a corto, mediano y largo plazo y cuáles acciones deben ponerse en práctica para revertir los efectos negativos de la experiencia vivida con el Clásico.

La magnitud mundialista de la justa, nos obliga también a garantizar que el estadio donde se juegue, cumpla con todos los requerimientos necesarios para estar al nivel exigido por la Major League Baseball.

Es cierto que obtener una sede podría servir de vitrina para, entre otras cosas, mostrar las bondades de República Dominicana con miras a fortalecer el turismo, pero hay que hacer un estudio de factibilidad que nos asegure que no vamos a pasar otra vergüenza, pero en tal caso, en nuestro patio.
Y digo eso no sólo por el desempeño deportivo que podríamos tener, sino porque habría que ver si los estadios no quedarían vacíos en los juegos (el costo promedio de la entrada más económica rondó los 60 dólares) tomando en cuenta que tenemos fama de que el béisbol nos corre por la sangre, un play con ¨dos gatos¨ desluciría el espectáculo y no ayudaría en nada en el aspecto económico.

Me pregunto si las empresas que perdieron millones de pesos en publicidad y mercadeo por la derrota prematura del equipo criollo, se arriesgarán de nuevo a invertir sus recursos para respaldar la iniciativa. También quisiera saber cuál criterio será usado para seleccionar a los jugadores que conformarían el equipo, qué actitud tendrán estos y con qué grado de compromiso y seriedad asumirán esa responsabilidad.

Como ven, son muchas las cosas que debemos tomar en cuenta antes de estar haciendo solicitudes alegres, claro, si es que queremos evitar volver a ser la burla del mundo por estar alardeando de ser lo que a la hora de la verdad no demostramos, sino pregúntenle a los Hanley, David, Canó, Reyes, Vólquez y demás hierbas aromáticas, que ellos si saben de eso.